“Tito” García, sodero Lethal

Cuenta la leyenda que “Tito” García fue el primer violero de V8, que tuvo un paso efímero por el prototipo de la primera banda del heavy nacional. Luego se dedicó a Legión y a su querida Lethal, allá por la década de 1980. “Mi primer laburo fue a los 19 años, en una oficina”, cuenta “Tito”, hijo de una ama de casa y de un músico de orquesta sinfónica.

“Tuve mi primera guitarra a los nueve y estudié en el conservatorio: toqué música clásica, toqué folklore, toqué de todo”, recuerda el músico que proviene de una familia de clase media baja, nieto de inmigrantes españoles que vinieron a hacer “la América”.

“Mi abuelo vino colado en un barco, con una mano atrás y una adelante”, cuenta el músico, entre risas. Su abuelo se hizo carpintero, su mamá costurera. “Tito” se hizo sodero durante 23 años. “Vengo de una familia de laburadores, de sol a sol, y la vida me llevó por ese mismo camino. Terminé el secundario, pero siempre hice laburos independientes que me permitían estar en la calle, libre, sin un patrón que te mire por arriba del hombro. “Hoy manejo un camión y me gusta, porque me permite tener una familia y seguir con la música”, cuenta.

“Cuando me casé largué los laburos, pero no pude. Lo intenté, pero llegaron los hijos, la casa, y tuve que tomar responsabilidades, y de nuevo con el reparto de soda. Hoy distribuyo mercadería y vivo bien, laburo todos los días desde las cuatro y media de la mañana. Cargo el camión, salgo, y vuelvo siempre después de las seis. Para ensayar me las arreglo como puedo, pero siempre me hago un tiempo”. “Tito” vive en Villa Adelina, y dice que sólo cuando sube al escenario entra “en otro plano”, descarga su furia. “La paso bien, somos los cuatro jinetes del apocalipsis, siento que está la química necesaria para seguir”.

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